¡Paz, bien y santa alegría!
Les saludamos nuevamente en el amor de Cristo.
Estábamos recordando que este año ha estado lleno de celebraciones para nosotros porque el pasado en el pasado mes de mayo cumplimos nuestro séptimo aniversario matrimonial y estamos muy alegres. Cada día que pasa es una nueva oportunidad que Dios nos regala para amarnos como Él nos ama y para que reafirmemos nuestra vocación, es decir, ese llamado concreto que nuestro Creador nos ha hecho para que alcancemos nuestra realización personal, siendo felices y contribuyendo al beneficio de nuestro prójimo.
Continuamos recordando que, festejamos también nuestro primer aniversario en Encuentro Matrimonial, ser parte de este movimiento de nuestra Iglesia Católica ha sido una verdadera bendición de Dios, porque entre muchas cosas nos ha permitido conocer y vivir con mayor intensidad nuestro sacramento, entender y respetar nuestros sentimientos y estrechar nuestros lazos con la Iglesia y la comunidad.
Siempre el Señor nos regala motivos para celebrar, motivémonos como San Pablo a entregarnos a Jesucristo por completo y descubriremos la belleza de su amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario