Bienvenidos al Pueblo de Dios

viernes, 27 de febrero de 2009

Así Somos en Cuaresma


Hermanos y hermanas en la fe, reciban un saludo fraternal de todos nosotros.

Con el Miércoles de Ceniza hemos dado comienzo al Tiempo de Cuaresma. La Cuaresma es el camino que los cristianos recorremos con fe y esperanza. Es tiempo de conversión, reconciliación y preparación; es nuestro camino hacia la Pascua. Esa es nuestra meta, la Pascua. Es por eso que la Cuaresma nos permite reconciliarnos con nuestro Señor y con nuestros hermanos.

Durante estos cuarenta días los invitamos a vivir intensamente este tiempo fuerte de gracia y salvación recordando nuestro bautismo, viviendo los valores del Evangelio y los sacramentos y participando en las distintas celebraciones de nuestra Iglesia.

Que nuestro amado Señor Jesucristo les bendiga y les guarde y les conceda una Santa Cuaresma.

Pueblo de Dios, “VIVIMOS PARA SERVIR”

Entrevista a: Virginia Montoya Arce, MSW
Por: Luis E. y Yermaliz Ventura
Lugar: San Juan, Puerto Rico.


“Todos nosotros debemos agradar a nuestro
prójimo y hacer las cosas para su bien y para que
pueda crecer en la fe”. (Romanos 15, 2-3)


Virginia Montoya nace en Santurce, Puerto Rico, un 20 de diciembre de 1941. Cursa estudios universitarios en la Universidad de Puerto Rico y luego en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, obteniendo el grado de maestría en Trabajo Social en el año 1972.

Nos recibió en su hogar con mucha amabilidad y sinceros deseos de compartir las respuestas que hacen posible nuestra entrevista.

Virginia ejerció la profesión de trabajo social hasta el año 2005, tiempo de servicio comprendido entre Estados Unidos y Puerto Rico. Al preguntarle qué le motivó a estudiar la profesión de trabajo social, nos dice que “…desde temprana edad sentí deseos de servir y ayudar a mi prójimo, en especial a las personas marginadas”. Recuerda con mucha emoción que su abuela siempre era caritativa con aquel que llegaba a la casa en busca de ayuda, les decía: “Nunca dejen ir de la casa a alguien que pida ayuda sin darle algo”. Los valores vividos en el hogar, la fe y el colaborar con el necesitado fueron su principal motivación.

Previo a sus estudios en trabajo social, Virginia realizó una maestría en Estudios Hispánicos. Siendo maestra de Humanidades tuvo la experiencia de que sus estudiantes la consultaban en busca de ayuda para enfrentar o solucionar diversas situaciones personales, ella los orientaba y les estimulaba a desarrollar sus talentos y capacidades. Sus estudiantes y el trabajo voluntario en la comunidad, para esa época en la ciudad de Nueva York, le permitieron descubrir que quería convertirse en una profesional de trabajo social.

Como trabajadora social en los Estados Unidos realiza servicios en agencias de rehabilitación, y posteriormente trabaja en un centro hospitalario por más de 15 años en el área de Psiquiatría Ambulatoria. Es para el año 1991 que regresa a Puerto Rico y continúa ejerciendo su profesión en el área de salud física y rehabilitación hasta acogerse al retiro en el año 2005.
¿Que tipo de ayuda usted ofreció a sus participantes en el área de salud física y mental? ¿Qué servicios brindó?, preguntamos.

“Realicé servicios en el área de trauma medular, en rehabilitación física para pacientes con amputaciones y en el área de intensivo, donde los pacientes están en condición delicada o etapa terminal. Las labores principales, entre otras, eran coordinar el proceso de alta de los pacientes y los servicios que requieren como equipo médico y servicios de medicina, así como la intervención con los familiares de éstos y visitar sus hogares para evaluar la residencia y determinar si se debían hacer arreglos a la estructura antes del alta”.

Quienes hemos podido conocer a nuestra entrevistada estamos conscientes de muchos de los valores que posee, entre ellos se encuentran: la fe, la tolerancia, la caridad, la bondad, la oración, el compromiso y el servicio.

De manera breve y precisa Virginia nos explica que “…la misión del trabajador social es ayudar al participante a ayudarse…” y aunque muchas veces el mismo sistema, entre otras cosas por la burocracia, obstaculiza esa labor, el trabajador social debe esforzarse por atender los mejores intereses de sus participantes, es decir su bienestar.

Por otra parte, Virginia recuerda con agrado y emoción que uno de los momentos más significativos para ella fue el trabajar en el área de intensivo porque le permitió acompañar a muchos pacientes en el paso de esta vida a la otra, “…pude orarles y ayudarles a orar para que murieran en paz y brindarle consuelo a los familiares”.

Al pensar en los retos que enfrentó mientras ejerció la profesión reconoce como uno de los principales, y con mucha probabilidad el mayor al que se enfrentan los trabajadores sociales que sirven en áreas de salud física y mental, la carencia de servicios y equipo médico en los hospitales porque les dificulta su trabajo y atenta directamente contra los participantes. Virginia, ¿cuál ha sido su mayor logro en el campo del trabajo social?

“Mi mayor logro ha sido haber entrado en el mundo de esa persona, ayudarle, haber sido un instrumento en su crecimiento personal, en pocas palabras, ayudarlo a ayudarse. Porque ha sido mi deseo siempre servir y porque es a esto a lo que Dios nos ha llamado a colaborar con los demás”.

El servicio al prójimo para Virginia ciertamente ha sido un llamado de Dios, lo que le ha permitido dar de sí a nuestra Iglesia en diferentes apostolados y ministerios. Hace cuatro años es Ministro Extraordinario de la Eucaristía, ministerio en el cual sirve con profundo amor y dedicación, pues le hace portadora del mismo Cristo. (“La Eucaristía significa y realiza la comunión de vida con Dios y la unidad del Pueblo de Dios.” CIC.1325)

Actualmente Virginia también es guía de los Talleres de Oración y Vida del Padre Ignacio Larrañaga, respondiendo así afirmativamente a un nuevo llamado que el Señor le ha hecho para bien del Pueblo de Dios.

“Celebra la Frase”

Cuando rezamos, hablamos nosotros a Dios, y cuando leemos su Palabra nos habla Dios a nosotros.

San Isidoro.

“Orando por las Vocaciones”


Creo en el joven que sabe decir sí a lo que no da dinero.

Creo en el joven que sabe estar cercanode quien sólo espera algo dado, sin cobrar.

Creo en el joven que arriesga y no calcula.

Creo en el joven que sabe que el caminose crece al caminar.

Creo en el joven que cambia el corazón cuandono es bueno y empieza desde dentro, sin hablar.

Creo en el joven que sabe que la vidase gana al perderla;y sabe que el ganarla, -por ganar-es como un globo que al oprimir el airebusca estallando campos de libertad.

Creo en el joven que ama la pequeña vida de al ladoy no escapa en sueños sin conquistar.

Creo en el joven que es libre,porque es libre desde dentro,libre con la fuerza de la verdad.

Creo en el joven que, como el río,deja en el chopo su voz callada al pasar.

Creo en el joven que sabe ser como el grano de trigoque cae en el surco y espera en la espiga su libertad.


(Emilio M. Mazariegos)

¿Podrían orar por mi vocación?

"La cosecha es mucha y los trabajadores, pocos. Rueguen, por tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos”. (Mt. 9, 36)

Visita este enlace: http://www.paulinaspr.org/ y deja tu oración en la sección de Peticiones de Oración. Estamos esperando para orar por ti.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Así Somos

¡En el amor de Jesús y María les saludamos con cariño!

Uno de los meses siempre recordados y esperados es febrero; en muchos países, incluyendo el nuestro, se celebra el 14 de este mes, el día del amor y la amistad.

Es importante que tengamos presente que para los cristianos, el valor de la amistad y el amor debemos vivirlos diariamente, los 365 días del año.

Hemos escuchado la Palabra de Dios que nos dice "Un amigo fiel es un amigo seguro; el que lo halla ha encontrado un tesoro". (Sirácides 6, 14).

En el Nuevo Testamento Jesús expresa la suma importancia que tiene la amistad: "No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos". (Jn. 15,13).

La amistad cristiana está impregnada de fidelidad, comunicación, sencillez, caridad, entrega. Podemos pues amar al amigo como Jesús nos ama.

Les exhortamos a todos a expresar y a celebrar el regalo de la amistad y les invitamos a que se enriquezcan con la Palabra de Dios tomada de Sirácides 6, 5-17.
¡Dios les bendiga!

Mapa Nueva Librería Paulinas en Avenida Roosevelt 174

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Buscamos personas que realicen trabajos en su comunidad (En la parroquia, en la Capilla, en el Colegio, en la Institución sin fines de lucro, etc.) Son personas como tu y como yo que pueden ser ejemplo para los demás. Son personas que componen el Pueblo de Dios. Si sabes de alguna persona (o tu mismo/a) que labora con el bien de la comunidad déjanos saber. Queremos entrevistarlo/a y presentar aquí nuevos modelos cercanos del Pueblo de Dios. ¿Qué tienes que hacer? Envía un correo electrónico a: paulinaspr.web@gmail.com para incluyendo la persona o personas que podamos entrevistar para nuestra sección “Pueblo de Dios” de este blog.